lunes, 7 de septiembre de 2015
El contenido de tu vida diaria
Piensa acerca de las experiencias corporales directas de tu vida. Nadie puede mentirte acerca de ello.
¿Cuántas horas al día pasas frente a la pantalla del televisor?, ¿frente a la pantalla del computador?, ¿detrás del parabrisas de tu automóvil?, ¿cuántas horas al día suman las tres?
¿De qué te estás protegiendo?
¿Cuánto de tu vida te llega por medio de una pantalla, a través de terceros? (¿Mirar hacer las cosas es tan emocionante como hacerlas tú misma? ¿Tienes suficiente tiempo para hacer todo lo que quieres? ¿Tienes la suficiente energía para ello?)
¿Y cuántas horas duermes al día? ¿Cómo te afecta el tiempo estandarizado, diseñado únicamente para sincronizar tus movimientos con los millones de personas? ¿Cuánto tiempo pasas sin saber qué hora es? ¿Quién o qué controla tus horas y tus minutos?
Esas horas y esos minutos que, sumados, forman tu vida.
¿Puedes ponerle precio a un hermoso día, en el que los pájaros cantan y la gente pasea junta? ¿Cuánto dinero necesitas que te paguen para que permanezcas encerrado y vendas cosas o archives papeles? ¿Qué puedes llegar a obtener luego que recompense este día de tu vida?
¿Cómo te afecta el estar entre el tumulto, rodeada por masas anónimas? ¿Te encuentras a ti misma limitando tus reacciones emocionales hacia otros seres humanos?
¿Y quién prepara tus comidas? ¿Comes sola a veces? ¿Son muchas las veces que comes parada? ¿Cuánto sabes acerca de lo que comes y de dónde proviene? ¿Cuánto te fías de ello? ¿De qué nos estamos privando al utilizar aparatos que nos ahorran trabajo? ¿y por los aparatos que nos ahorran pensar? ¿Cómo te afectan los requisitos de eficiencia que atribuyen mayor valor al producto antes que al proceso, al futuro antes que al presente, (ese momento presente que es cada vez más corto, a medida que nos aceleramos más y más hacia el futuro)? ¿Hacia qué nos estamos acelerando?
¿Estamos ahorrando tiempo? ¿Ahorrándolo para qué?
¿Cómo te afecta ser dirigida a través de caminos prescritos, en ascensores, autobuses, metros, escaleras mecánicas, autopistas y aceras? ¿Cómo te afecta el moverte, el trabajar, y el vivir en dos -y tres- dimensiones? ¿Cómo te afecta el estar organizada, inmovilizada, y programada, en vez de errante, vagando libre y espontáneamente? ¿reciclando "basura"? ¿liberando productos de las tiendas?
¿Cuánta libertad de movimiento posees: libertad de moverte a través del espacio, de moverte tan lejos como quieras, en nuevas e inexploradas direcciones?
¿Y cómo te afecta esperar? esperar en filas, en medio del tráfico, esperar para comer, esperar al autobús, esperar para ir al baño; constantemente aprendiendo a castigar e ignorar tus necesidades espontáneas.
¿Y cómo te afecta el postergar tus deseos? ¿La represión sexual? ¿El aplazamiento o la negación del placer, comenzando en la niñez, junto con la supresión de todo lo espontáneo que hay dentro de ti: todo lo que evidencia tu naturaleza salvaje, tu pertenencia al reino animal?
¿Es peligroso el placer? ¿Podría ser placentero el peligro?
¿Necesitas a veces ver el cielo? (¿Aún puedes ver muchas estrellas en él?) ¿Necesitas a veces ver agua, hojas, plantas, animales? ¿Brillando, resplandeciendo, moviéndose?
¿Es por ello que tienes una mascota, un acuario y plantas de interior? ¿O son la televisión y el video, tu brillo, tu resplandor, tu movimiento?
¿Cuánto de tu vida te llega por medio de una pantalla, a través de terceros?
¿Te fascinan los videos de ti y tus amigos como si fueras de algún modo más real en imágenes de lo que eres en vida?
¿Si hiciesen una película de tu vida, valdría la pena mirarla? ¿Y cómo te sientes en situaciones de pasividad forzosa? ¿Cómo te afecta el incesante asalto de comunicación simbólica -sonora, visual, impresa, en carteles, videos, computadores, radio, voces robóticas- al ir vagando por un bosque de letreros, ¿Qué es lo que te están imponiendo?
¿Necesitas a veces soledad, tranquilidad, reflexión? ¿Lo recuerdas? ¿Pensar por ti misma,. antes que por mera reacción de estímulos? ¿Te resulta difícil no mirar?
¿Es dejar de mirar justamente lo que no está permitido?
¿Adónde puedes ir y encontrar silencio y soledad? No silencio artificial, sino silencio puro. No aislamiento, sino una tierna soledad. ¿Cuántas veces te has detenido a hacerte preguntas como éstas?
¿Te encuentras cometiendo actos de violencia simbólica?
¿Te encuentras a veces sola, de tal manera que ni siquiera las palabras lo pueden expresar?
¿Te sientes a veces a punto de PERDER EL CONTROL?
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